En mi ultimo trabajo, represento a mi hijo con la edad de 2 años aproximadamente, en la cual tenia la manía de señalarlo todo, veía en el aparte de su nombre un chico aguerrido; creo que entre el amor de padre y la influencia que en aquel momento había de la película 300, hice un boceto que hace unos días retome y hoy os muestro en este post. Los ositos de peluche son el contrapunto al color y la supuesta rectitud que muestra Héctor.
2 comentarios:
al niño sólo le faltaría decir: "esto es Esparta" ...
Aunque no sé qué hará con esos guerreros tan entrañables.
Me gusta el efecto de las letras siendo discretas e impactantes a la vez.
Muy bueno
Ese guerrero precioso buen trabajo cariño. ..
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